¡Hola, devoradores! ¿Qué tal va la semana? ¡Espero que bien! Durante los próximos días iré mostrando más reseñas y entrevistas de las autoras que participan en la segunda edición de los Pasatiempos Literarios. ¿Todavía no os habéis enterado del macroconcurso? ¡Podéis ganar muchos premios!
---------------------------------------> Si queréis saber más pinchad aquí <------------------------------------
Hoy vengo con una nueva reseña, pero esta vez del primer libro de una tetralogía que me esta ENCANTANDO y que además es de uno de mis géneros favoritos del mundo mundial: fantasía épica. Y yo solo digo que es una pasada.
¿Queréis saber que opino de esta primera parte? ¡Pues seguid leyendo!
Autora: Alia Salazar
Saga: El ocaso del sol
Editorial: Autopublicada
Edición: Kindle / Tapa blanda
Páginas: 382
Precio: 2,99€ / 13,26€
Todos los mortales llevan en el pecho el Don, la marca laberíntica cuyo
color indica qué dios los ampara. Darshek no. El mago luce un engendro
de fuego hincado en la carne, y habrá de emprender un viaje por toda la
tierra conocida para hallar la respuesta a una pregunta que no se atreve
a formular.
Aventuras, civilizaciones desconocidas, amigos y enemigos. El destino empuja a los mortales y, a los que se resisten, los arrastra.
El fuego de Iara es el primer libro de la saga de fantasía épica El ocaso del sol, una obra dirigida a un público adulto: comienza como novela juvenil, pero cada tomo tiene un tono más maduro que el anterior. Si te gustaron de adolescente las novelas de espada y brujería de los años 80 y 90, si disfrutaste de la Dragonlance y El elfo oscuro pero buscas una lectura más exigente, esta tetralogía está pensada para ti. Hay pocas escritoras españolas de novela fantástica que trabajen la documentación histórica al nivel de detalle de Alia Salazar. La autora bebe del folclore tradicional y lo mezcla con la fantasía heroica de corte clásico para crear un producto totalmente distinto, repleto de batallas legendarias, de dioses y de magia, en que los elfos no son como esperamos que sean.
Aventuras, civilizaciones desconocidas, amigos y enemigos. El destino empuja a los mortales y, a los que se resisten, los arrastra.
El fuego de Iara es el primer libro de la saga de fantasía épica El ocaso del sol, una obra dirigida a un público adulto: comienza como novela juvenil, pero cada tomo tiene un tono más maduro que el anterior. Si te gustaron de adolescente las novelas de espada y brujería de los años 80 y 90, si disfrutaste de la Dragonlance y El elfo oscuro pero buscas una lectura más exigente, esta tetralogía está pensada para ti. Hay pocas escritoras españolas de novela fantástica que trabajen la documentación histórica al nivel de detalle de Alia Salazar. La autora bebe del folclore tradicional y lo mezcla con la fantasía heroica de corte clásico para crear un producto totalmente distinto, repleto de batallas legendarias, de dioses y de magia, en que los elfos no son como esperamos que sean.
Opinión personal:
Aviso, si ya muchas de las novelas que he reseñado de este tipo os
he comentado que son muy densas y pueden llegar a aburrir o hacer que
abandonéis su lectura, con El Fuego de Iara os pasará el doble ya que es mucho más densa, con un vocabulario mucho más rebuscado y sobretodo con mucho WB. Vamos que ya se os puede quitar de la cabeza que vais a leer una novela tranquilita de fantasía juvenil antes de empezar con ella.
Bien, el principio de la novela es... curioso, extraño y muy descriptivo. Es una buena toma de contacto con la forma de narrar de la autora, que es muy original y poco común, pues utiliza el estilo de la épica tradicional (si habéis leído romanceros, cantares de gesta, etc más o menos os haréis a la idea) El primer capítulo, me tomó tan de sorpresa el estilo de Alia, que tuve que leerlo dos veces para acostumbrarme y seguir con la lectura con más calma. El ritmo es bastante lento, tiene muchisimas descripciones, casi no hay diálogos - aunque en este primero tiene más que en el segundo - y el vocabulario empleado es raro - pero se puede entender - y muy bonito. Es muy agradable leerlo. A mí al menos durante la lectura de toda la historia me tenía envuelta en ella y gracias a todas las descripciones y detalles la imagen de las escenas se me formaban en la cabeza de forma muy fácil.
El Worldbuilding es una p-a-s-a-d-a. La autora ha cogido elementos de diferentes mitologías y las ha transversado para crear unos seres totalmente diferentes, les ha impuesto leyes, creencias e incluso religiones y ha creado un nuevo mundo con unos dioses muy curiosos (el que me parece una pasada es Ania, el dios del viento pues dependiendo de que viento es se llama de una forma u otra y tiene un carácter diferente) Incluso la idea de utilizar algo tan trillado como el poder de los elementos lo ha utilizado a su favor, creado algo nuevo e innovador. Durante toda la trama podemos conocer como viven cada uno de los seres que se menciona en el libro y sus ritos gracias a unos extractos (algunas veces más largos y otras veces más cortos) que la autora pone al final de los capítulos para entender mejor el mundo por el que nos está haciendo viajar. También es muy curioso los Dones, y la importancia que tienen durante la trama y lo que pueden llegar a decirte dependiendo del color.
Sigamos con los personajes me han E-N-C-A-N-T-A-D-O. No hay buenos ni malos, son todos grises - aunque es cierto que alguno tira más hacia el negro que hacia el blanco - Sus personalidades están muy bien definidas y se nota que la autora no ha hecho un copia y pega; todos son diferentes y por lo tanto tienen reacciones distintas durante el transcurso de la trama. Hay muchisimos y todos tienen sus diferentes tramas y lo que más gracia me hace es que todos - al menos eso me parece - son principales, ya que todos tienen bastante importancia en el desarrollo de la trama. De momento mis favoritos son; Mohari una trasgo esteparia que es amor y me encanta lo sencilla que es y el elfo desquiciado (que ahora en el segundo libro está mostrándose más y es maravilloso porque está dando mucha vida a la historia)
¿Y lo malos? Pues... ¿creo que no... hay? A ver... en la segunda parte si que se puede ir viendo que los malos o los que manipulan más son los dioses, pero en esta primera parte (que es más tirando a juvenil/new adult) simplemente vemos el viaje del héroe, el crecimiento que tiene este y poca cosa más ya que es el primer libro y es una introducción (muy bien hecha) del mundo y de los personajes.
Como os decía más arriba el ritmo es lento, pero la trama también y además la autora nos obliga a leerlo todo poco a poco gracias a sus (maravillosas) descripciones muuy detalladas. Así que la trama principal es muy lenta, pero mientras podemos ver otras minitramas que desembocan en ella para darle más acción y ritmo, porque hay capítulos que son muy largos y sin nada de acción. Total, que las minitramas se van cerrando (más o menos, recordemos que es el primer libro de cuatro) y la que queda abierta es la principal.
Por último quiero comentar el romance, tema que siempre me molesta mucho sobretodo en las novelas de fantasía épica. No hay. Y cuando digo que no hay, no hay. En ningún momento de la historia hay amor, y es que a ver... no la necesita. La trama es tan interesante y tiene tantas cosas, que lo que menos se echa a faltar es el amor entre los personajes.
Devoradores, si queréis una novela de fantasía épica como las de antes, con un vocabulario rico, unas descripciones que son una pasada y un wb que es para quitarse el sombrero, El fuego de Iara es vuestra historia.
Bien, el principio de la novela es... curioso, extraño y muy descriptivo. Es una buena toma de contacto con la forma de narrar de la autora, que es muy original y poco común, pues utiliza el estilo de la épica tradicional (si habéis leído romanceros, cantares de gesta, etc más o menos os haréis a la idea) El primer capítulo, me tomó tan de sorpresa el estilo de Alia, que tuve que leerlo dos veces para acostumbrarme y seguir con la lectura con más calma. El ritmo es bastante lento, tiene muchisimas descripciones, casi no hay diálogos - aunque en este primero tiene más que en el segundo - y el vocabulario empleado es raro - pero se puede entender - y muy bonito. Es muy agradable leerlo. A mí al menos durante la lectura de toda la historia me tenía envuelta en ella y gracias a todas las descripciones y detalles la imagen de las escenas se me formaban en la cabeza de forma muy fácil.
El Worldbuilding es una p-a-s-a-d-a. La autora ha cogido elementos de diferentes mitologías y las ha transversado para crear unos seres totalmente diferentes, les ha impuesto leyes, creencias e incluso religiones y ha creado un nuevo mundo con unos dioses muy curiosos (el que me parece una pasada es Ania, el dios del viento pues dependiendo de que viento es se llama de una forma u otra y tiene un carácter diferente) Incluso la idea de utilizar algo tan trillado como el poder de los elementos lo ha utilizado a su favor, creado algo nuevo e innovador. Durante toda la trama podemos conocer como viven cada uno de los seres que se menciona en el libro y sus ritos gracias a unos extractos (algunas veces más largos y otras veces más cortos) que la autora pone al final de los capítulos para entender mejor el mundo por el que nos está haciendo viajar. También es muy curioso los Dones, y la importancia que tienen durante la trama y lo que pueden llegar a decirte dependiendo del color.
Sigamos con los personajes me han E-N-C-A-N-T-A-D-O. No hay buenos ni malos, son todos grises - aunque es cierto que alguno tira más hacia el negro que hacia el blanco - Sus personalidades están muy bien definidas y se nota que la autora no ha hecho un copia y pega; todos son diferentes y por lo tanto tienen reacciones distintas durante el transcurso de la trama. Hay muchisimos y todos tienen sus diferentes tramas y lo que más gracia me hace es que todos - al menos eso me parece - son principales, ya que todos tienen bastante importancia en el desarrollo de la trama. De momento mis favoritos son; Mohari una trasgo esteparia que es amor y me encanta lo sencilla que es y el elfo desquiciado (que ahora en el segundo libro está mostrándose más y es maravilloso porque está dando mucha vida a la historia)
¿Y lo malos? Pues... ¿creo que no... hay? A ver... en la segunda parte si que se puede ir viendo que los malos o los que manipulan más son los dioses, pero en esta primera parte (que es más tirando a juvenil/new adult) simplemente vemos el viaje del héroe, el crecimiento que tiene este y poca cosa más ya que es el primer libro y es una introducción (muy bien hecha) del mundo y de los personajes.
Como os decía más arriba el ritmo es lento, pero la trama también y además la autora nos obliga a leerlo todo poco a poco gracias a sus (maravillosas) descripciones muuy detalladas. Así que la trama principal es muy lenta, pero mientras podemos ver otras minitramas que desembocan en ella para darle más acción y ritmo, porque hay capítulos que son muy largos y sin nada de acción. Total, que las minitramas se van cerrando (más o menos, recordemos que es el primer libro de cuatro) y la que queda abierta es la principal.
Por último quiero comentar el romance, tema que siempre me molesta mucho sobretodo en las novelas de fantasía épica. No hay. Y cuando digo que no hay, no hay. En ningún momento de la historia hay amor, y es que a ver... no la necesita. La trama es tan interesante y tiene tantas cosas, que lo que menos se echa a faltar es el amor entre los personajes.
Devoradores, si queréis una novela de fantasía épica como las de antes, con un vocabulario rico, unas descripciones que son una pasada y un wb que es para quitarse el sombrero, El fuego de Iara es vuestra historia.
Mi puntuación:
10/10
Altamente recomendable
No hay comentarios :
Publicar un comentario